Las fases de la Luna y el Yoga

La Luna es el gran astro que rige los ciclos del agua. Con su posición influye en las mareas emociones , en nuestro cuerpo y en todo ser viviente.
Es en el segundo chakra donde notarás la energía de la Luna, ya que se relaciona con nuestro elemento agua. El agua representa la creación, la vida, el fluir, la sexualidad, las emociones y sentimientos. Aquí se encuentra nuestra capacidad creadora humana, el impulso creador hacia todas nuestras relaciones y la vida misma.
Según la sabiduría milenaria del Yoga , las fases de la Luna tienen un efecto sobre el cuerpo y la mente , específicamente en el sistema endocrino . Al saber como la Luna nos influencia podemos canalizar y optimizar los efectos de ella y su impacto en nuestro cuerpo.

Las 4 fases de la luna pueden afectar o beneficiar nuestra práctica de Yoga

Luna Nueva:

Es un buen momento de sembrar intenciones claras y precisas, también para prácticas meditativas, ya que nos traerá mas claridad mental .
Debido a que nos encontramos con noches más oscuras, estamos en el momento energético más bajo. Nuestro organismo esta mas receptivo a limpiarse ya que el Apana (la energía que limpia) esta mas presente ,aquí se recomienda hacer ayunos a base de líquidos, comer liviano, como vegetales y frutas verdes. 

Nuestro cuerpo puede encontrarse poco receptivo para actividades físicas de alta exigencia. Además, se suele decir que durante este periodo nuestras articulaciones o ligamentos estarán menos hidratados; por tanto, se reduce nuestra capacidad de flexibilidad. 

Durante 11 días después de la Luna Nueva, estás en el punto de equilibrio, donde el sistema endocrino se reajusta a si mismo.

Luna Creciente:

Durante esta etapa la luna empieza a ganar luz poco a poco; por tanto, es ideal para crear nuevos hábitos y poner en práctica acciones concretas para aquello que sembramos como intención durante la luna nueva.
En las 14 noches que dura esta fase ,el Prana (energía vital ) se va acumulando y asentando, haciéndote sentir con mayor energía y vitalidad para actuar en consecuencia con la intención sembrada.
Esta etapa es perfecta para reafirmar nuestro compromiso con nuestra práctica de Yoga. Te será más fácil ser disciplinad@ y tener una practica mas activa. Es un buen momento para adquirir un buen hábito, para tu cuidado personal.

Luna Llena:

En este momento la luna ha ganado toda la luz posible y está más brillante que nunca. 

Es un período de expansión, la energía alrededor está en su máximo esplendor; por tanto, nuestro Prana (energía vital) se encuentra en su máxima capacidad. Sin embargo, puede que nos sintamos desbordados ,poco más reactivos a nivel emocional pudiéndonos desbordar con tanta energía.

 También las secreciones glandulares alcanzan su máximo nivel, y estás altamente estimuladas. Para no desperdiciar esa energía y usarla para tu regeneración, también es recomendable ayunar y beber bastante líquido ese día.

 Por su parte el cuerpo incrementa su flexibilidad física, por ello, tampoco se recomienda asanas de mucha exigencia física. 

También es un buen momento para cargar nuestras piedras dejándolas expuestas a la influencia de la Luna.

Luna Menguante:

Decrecimiento de la Luna y de la energía es un gran periodo para la desintoxicación, eliminación y para soltar todo aquello que ya no necesitas. El Apana (eliminación) esta mas presente , por ello dirigiremos nuestra práctica a series desintoxicantes y pranayamas para depurar. Podrías sentir como la energía va disminuyendo y sentirte mas cansad@, por ello es necesario que en esta etapa trabajes tu disciplina y la mantengas para que regules los niveles de energía.
También es un buen periodo para hacer depuraciones alimentarias e ir prescindiendo de los alimentos procesados . Con esta fase vamos dejando espacio para nuestra continua renovación y acercamiento al equilibrio de nuestra salud.

Cosmofusión

@yoguiniestelar